El grupo armado Hezbollah, el viejo enemigo de Israel, acaba de abrir desde el Líbano un segundo frente en la guerra, avivando los temores de que se pueda desatar una confrontación más amplia en la región.
Los combatientes libaneses han estado atacando puestos y poblados israelíes a lo largo de la frontera, y el grupo ha lanzado cohetes y drones hacia objetivos israelíes.
Paralelamente, tanques, artillería y aeronaves de Israel han estado impactando zonas en el lado libanés de la frontera. La situación es tan tensa que el ejército de Israel ha comenzado a evacuar un gran número de poblaciones ubicadas cerca de la línea fronteriza.
Las fuerzas militares israelíes dicen que se han lanzado más de 1.700 cohetes desde Líbano a Israel, lo que ha causado la muerte de 15 israelíes, incluidos 9 soldados, y heridas a más de 150 personas.
Israel ha evacuado a unas 60.000 personas de más de 40 comunidades del norte del país, incluida la importante ciudad de Kiryat Shemona, que tiene 22.000 habitantes.
En tanto, cerca de 160 personas han muerto por los ataques aéreos y los bombardeos israelíes en Líbano, de acuerdo con un conteo llevado por The Associated Press. La mayoría de esas personas eran combatientes de Hezbollah y grupos aliados, pero al menos 19 civiles también perdieron la vida, entre ellos periodistas y niños.
El miércoles último, Benny Gantz, miembro del Gabinete de Guerra de Israel, advirtió que, si la comunidad internacional y el gobierno libanés no frenan a Hezbollah, Israel lo hará.
El jefe militar israelí, el teniente general Herzi Halevi, dijo que las fuerzas militares están en estado de máxima preparación y ha aprobado planes en caso de que decida abrir un segundo frente en el norte.
Hezbollah, por su parte, dice que el objetivo de sus ataques es disminuir la presión sobre la Franja de Gaza, donde Israel está llevando a cabo una ofensiva terrestre, aérea y marítima sin precedentes, con la que pretende erradicar al grupo terrorista Hamás y rescatar a unas 129 personas que están cautivas en ese territorio.
Mientras sus soldados están en la Franja de Gaza, Israel ha tratado de limitar su lucha en el norte. Las capacidades militares de Hezbollah son muy superiores a las de Hamás.
De todas formas, funcionarios israelíes advierten cada vez más que el país está preparado para expandir el conflicto y que Hezbollah debería estar preparado para pagar un precio por el daño que está causando.
Si bien Hamás y Hezbollah tienen en común su manifiesta oposición a Israel y su apoyo a la causa palestina, poseen raíces distintas y algunas veces, muestran desacuerdos.
Ambos son designados como grupos terroristas por Estados Unidos, la Unión Europea y otros países occidentales.
Mientras Hamás (acrónimo árabe de Movimiento de Resistencia Islámica) se trata de un grupo con raíces sunni y es de origen palestino, por su parte Hezbollah (cuyo nombre significa Partido de Dios) es una organización política y militante chiíta originaria del Líbano, el estado vecino al norte de Israel, que cuenta con el apoyo de Irán.
Los orígenes precisos de Hezbollah son difíciles de rastrear, pero sus precursores surgieron después de que Israel invadiera una parte del sur de Líbano en 1982 como respuesta a una serie de ataques de militantes palestinos contra Israel, especialmente el intento de asesinato del embajador israelí en Reino Unido.
El grupo chiíta dice contar con 100.000 combatientes y los analistas calculan que su arsenal de misiles oscila entre 130.000 y 150.000 unidades.
© El Día de Gualeguaychú